Scones de suero de leche con queso fresco

Poner un bol sobre la tapa del vaso y pesar el jugo de limón. Reservar.
Poner en el vaso la leche y calentar 16 min/90°C/vel 2. Después, programar 1 min/vel 2 y, mientras tanto, verter lentamente sobre la tapa el jugo de limón, (durante este tiempo la leche se separará en cuajada y suero). Dejar reposar durante 30 minutos. Forrar el cestillo con una bolsa de tela o tela de gasa fina y colocarlo sobre un bol grande. Verter la mezcla en el cestillo sobre la bolsa o gasa y dejar escurrir durante 1-2 horas. Abrir la gasa y espolvorear la sal. Cerrar y retorcer bien la gasa. Colocar un peso encima y reservar el cestillo en la heladera durante aprox. 4 horas. Verter el suero recogido en un tarro de cristal y reservar también en la heladera.

Precalentar el horno a 230°C. Forrar la bandeja de horno con papel de hornear y reservar.
Poner en el vaso la harina, la sal, el bicarbonato, la levadura y la manteca y mezclar 5 seg/vel 8.
Añadir 200 g de suero de leche reservado. Mezclar 5 seg/vel 5 e inicie 20 seg/función amasado. Retirar la masa sobre una superficie de trabajo enharinada y presionar ligeramente con las manos hasta formar un círculo de aprox. 2,5 cm de grosor. Introducir en harina un cortapastas de Ø 5 cm y cortar círculos de masa sin girar el cortapastas (repita antes de cada corte). Colocar los círculos de masa uno al lado del otro en la bandeja preparada. Volver a unir los restos de masa y repetir el procedimiento.
Hornear durante 15-20 minutos (230°C) o hasta que estén dorados. Servir templados con queso fresco y mermelada.

¡Que delicia estos scones! Una receta creativa y muy fácil de hacer con tu mano derecha en la cocina.